Roble albar (Quercus petraea)

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de Julián Vinuesa

Roble albar 

Quercus petraea (Matt.) Liebl., 1.784

Foto e identificación Rafael Tormo Molina (UEx), profesor del curso on-line Botánica para la Humanidad

El Profesor Rafael Tormo Molina, director del Curso "Botánica para la Humanidad", subió al Foro del Curso "Esta Especie" la imagen que se muestra, acompañada del siguiente texto: "Árbol caducifolio propio del norte de la Península Ibérica. En este caso hay que fijarse que tiene las hojas claramente pecioladas y los frutos casi sésiles (cortamente pedunculados)". En éste caso, fue fácil determinar que se trataba del roble albar (Quercus petraea).

En el Parque Natural de la Montaña Palentina

Fotos Julián Vinuesa (18-06-2022)

En el Parque Natural de la Montaña Palentina destaca un espectacular ejemplar de Roble Albar con una edad estimada de 800 años, un verdadero coloso que ha sobrevivido a temporales, incendios, incluso proyectos de tala,........ ¡¡Todo un monumento natural que despierta nuestra admiración!! Comentario del autor de las fotos, el estimado amigo Julián Vinuesa Sánchez.

Reino: Plantae

División: Spermatophyta
Subdivisión: Magnoliophyta (Angiospermae)
Clase: Magnoliopsida (Dicotyledones)

Orden: Fagales

Familia: Fagaceae

Género: Quercus

Especie: Quercus petraea

Quercus petraea es un árbol caducifolio, corpulento y majestuoso, de hasta 35 m. de altura, de copa amplia y abierta y un potente sistema radical. Ramillas juveniles lampiñas, de color castaño brillante.

hojas claramente pecioladas, más o menos obovadas, de margen ondulado, verde oscuras por el haz y algo más claras por el envés, con la base del limbo desde cuneada a levemente auriculada, lampiñas por el haz y con algunos pelos en los nervios del envés. 

flores dispuestas en amentos colgantes, muy visibles en primavera son las flores masculinas. Las femeninas, en el mismo árbol, son sentadas y pasan más desapercibidas. Florece en primavera.

fruto bellota, de color amarillento, que aparecen solitarias o en pequeños grupos; nacen sésiles o sujetas por un corto pedúnculo.

hábitat prefiere los suelos silíceos profundos, con suficiente humedad ambiental. Suele formar parte de bosques mixtos con otras especies caducifolias del género, y con pinos o abetos.

distribución se extiende desde el oeste de Asia hasta el suroeste de Europa. En la Península Ibérica aparece por todo el Norte de España, alcanzando hacia el Sur el Sistema Central y la Serranía de Cuenca. 

En la Península se reconocen dos subespecies: la denominada Quercus petraea subsp. petraea que tiene hojas con 5-7 pares de nervios laterales y los nervios derivados de éstos son poco visibles, mientras que en la Quercus petraea subsp. huguetiana hay 7-9 pares y los nervios más pequeños son claramente visibles. La primera es la más extendida, mientras que la segunda aparece sobre todo en la mitad Sur de Cataluña y en algunos puntos aislados de Navarra y Cantabria.

utilidades los frutos, las bellotas, sirven de alimento a la fauna silvestre y al ganado porcino.

La madera es muy apreciada, dura (como una piedra, de ahí el nombre de la especie, petraea) y resistente, muy bella, empleada tanto para grandes piezas como para decoración. Con ella también se fabrican las mejores duelas de barricas para la maduración del vino y de otras bebidas destiladas, a cuya maduración contribuye aportando ricos aromas. También es excelente como carbón.

La corteza es rica en taninos y se ha usado para curtir pieles y también para algunos fines medicinales (Se le atribuyen propiedades astrigentes y virostáticas, por vía tópica se utiliza en afecciones cutáneas, por vía interna en casos de diarrea aguda, sobre las mucosas en caso de inflamación moderada). En cosmética se utiliza el extracto de corteza como antiseborreico. 

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