miércoles, 21 de septiembre de 2011

!Qué difícil¡

Antonio García Maldonado "AGMaldonado", educardor, enseñante, maestro, gran amante de la naturaleza, magnifico fotógrafo, el fotógrafo del blog, ..., y sobre todo amigo, ha fallecido. El dolor, la congoja y la emoción de los duros momentos vividos, ayer y hoy, me embargan y me es imposible relatar ahora "algunas" de las vivencias que he compartido con Él. Eso lo dejo para cuanto pueda. Subo aquí la elegía de Miguel Hernández ante la perdida de su amigo Ramón Sijé en la Navidad de 1935. Yo la hago ahora mi lamento.

(En Orihuela, su pueblo y el mío, se me
ha muerto como del rayo Ramón Sijé, con
quien tanto quería.)

Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.

Alimentando lluvias, caracolas
y órganos mi dolor sin instrumento
a las desalentadas amapolas

daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado,
que por doler me duele hasta el aliento.

Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.

No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.

Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.

Temprano levantó la muerte el vuelo,
temprano madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo.

No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.

En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofes y hambrienta.

Quiero escarbar la tierra con los dientes,
quiero apartar la tierra parte a parte
a dentelladas secas y calientes.

Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte.

Volverás a mi huerto y a mi higuera;
por los altos andamios de las flores
pajareará tu alma colmenera

de angelicales ceras y labores.
Volverás al arrullo de las rejas
de los enamorados labradores.

Alegrarás la sombra de mis cejas,
y en tu sangre se irán a cada lado
disputando tu novia y las abejas.

Tu corazón, ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.

A las aladas almas de las rosas
del almendro de nata le requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.

Como tu decía cuando no te acompañaba en algún sendero "Te he echado de menos", de menos, mucho de menos te voy a echar yo. Nada será lo mismo compañero. 

3 comentarios:

  1. verdad nada será lo mismo, par quien hacer mas fotos, a quien contar una nueva ruta encontrado
    para mi es una parte de mi mismo que se ha muerto
    Era mi hermanito, lo he querido muchísima
    Bérénice

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  2. Pues sí, nos ha dejado huérfanos Antonio García Maldonado, bellotamotril como yo, cariñosamente, lo llamaba. No lo conocía de mucho tiempo, pero en estos escasos 5 ó 6 años le cogí un gran cariño, tanto yo como Pepa, mi esposa.
    Pero tenemos el recuerdo de muchos buenos momentos en su compañía en la naturaleza granadina a la que tanto amaba.
    Descansa en paz amigo.
    Antonio Verdugo y Pepa Mota.

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  3. Realmente ahora mismo sólo puedo sumarme al dolor de todos los que lo sentimos. Con el tiempo y la perspectiva, que no con menos dolor, recordaremos muchos momentos pasados, siempre en relación con la educación y sobre todo la medioambiental. Siempre será recordado por sus magníficas en insuperables fotos, llenas de encanto, belleza, amor, precisión, ciencia, arte........

    Pero también será recordado como excelente persona, amigo, compañero, maestro. Su legado nos queda. Eso debe consolarnos. Hasta siempre, compañero.
    Pepe Caballero. Aprendiz de maestro.

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